San Lorenzo jugó y volvió a empatar, esta vez contra Newell ‘s en Rosario, con un resultado final de 2-2. El partido se desarrolló en un contexto donde ninguno de los equipos mereció una victoria clara. Por un lado, podría haberse ganado; por otro, también podría haberse perdido. Sin embargo, el resultado no favorece en absoluto a San Lorenzo, que continúa sin poder obtener victorias y sin mostrar signos de mejoría.
Con este empate, San Lorenzo prácticamente se despide de otra edición de la Copa de la Liga Profesional, incapaz de clasificar a la siguiente fase desde la creación del torneo. Sumando nada ams que 8 puntos en 8 partidos y a 7 puntos del último clasificado.
El encuentro de anoche fue particularmente extraño para analizar. Fué muy entrecortado, con mucho pelotazo y poco juego elaborado. Ambos equipos, en situación irregular, no lograron imponer su dominio ni merecer la victoria; por tanto, el empate fue justo.
La única diferencia notable en el equipo de San Lorenzo fue el ingreso de Ferreira al once titular. Es el único jugador capaz de desequilibrar y generar juego en el plantel, mostrándose como una opción para recibir y distribuir la pelota, así como para echar centros precisos. Sin embargo, más allá de este cambio, el equipo mostró las mismas falencias de siempre: escaso juego ofensivo y fragilidad defensiva. No se observó nada nuevo ni alentador que de indicios de un cambio significativo en el desempeño del equipo. También lo que preocupa es que el único que haga goles en el equipo sea Adam Bareiro, el se resfría y el equipo no hace un gol ni por asomo.
Es evidente que Insúa no es culpable de la falta de concentración de algunos jugadores, como Hernández y Campi en el primer gol, dejando cabecear a un rival solo en el área. Tampoco es responsable de las decisiones individuales, como la pésima salida de Altamirano en la última pelota del primer tiempo, que condujo al segundo gol de Newell ‘s. Sin embargo, sí es responsable de la falta de variantes tácticas/técnicas y de la poca rotación en el equipo titular. En ocho partidos, Insúa solo ha realizado tres cambios en cada partido, a pesar de contar con un plantel amplio y la posibilidad de realizar hasta cinco cambios por partido.
El resultado de ayer no satisface a San Lorenzo, ya que implica la eliminación de la Copa de la Liga y evidencia la falta de progreso del equipo. Es necesario exigir más.