La situación legal de San Lorenzo es preocupante. Desde que asumió la actual dirigencia, al Club le iniciaron más de 230 juicios. A esto se le suman gravísimos incumplimientos estatutarios, a la vista de todos, como las demoras en el tratamiento del balance y los presupuestos, y la falta de información que, entre otras cosas, impide tener un cuadro de análisis certero sobre la real situación económica y financiera de la Institución.
Desde Siempre San Lorenzo hemos estudiado todas las áreas de posible responsabilidad legal del oficialismo. En razón de ello, primero presentamos notas a través de la Secretaría del Club y luego, ante la falta de respuesta oficial, articulamos denuncias en la Inspección General de Justicia y el Tribunal de Ética y Disciplina del Club, contra los miembros de la Comisión Directiva y las autoridades de la Asamblea de Representantes.
En todos los casos evitaron responder o lo hicieron con evasivas, en procesos que se encuentran activos y en función de los cuales vamos a seguir actuando.
Como abogados y abogadas de un espacio que junto con la gente consiguió las elecciones anticipadas, tenemos claro que nuestra primera misión al entrar en el Club será realizar una profunda auditoría y evaluar qué responsabilidad le cabe a los dirigentes salientes tanto en el ámbito civil como penal. Además, y en virtud de los resultados de esa auditoría, analizaremos la viabilidad de arbitrar los medios necesarios para que los dirigentes respondan con su patrimonio solidaria e ilimitadamente, en los términos del art. 42 del Estatuto. Se trata de una de las herramientas que nos permitirán recuperar la institucionalidad perdida durante los últimos años.
En San Lorenzo no puede haber impunidad: quienes hayan perjudicado económicamente al Club deberán hacerse cargo.
Laura Fiasche es Abogada, Docente en Derecho y miembro de Siempre San Lorenzo.