Dialogamos con Lorena Alloni y Cristian Evangelista, integrantes de la Agrupación «Con el alma en Boedo» quienes están llevando a cabo una olla popular en la Casa del Vitalicio. // Por Antonela Dagnino
Si de algo estamos seguros es que la gente de San Lorenzo no se puede quedar quieta cuando de ayudar al prójimo se trata, son los valores fundacionales que llevan en su ADN. Y así lo cuentan: Con la agrupación «Con el alma en Boedo» apenas comenzó la pandemia sentimos la necesidad de salir a ayudar, típico de sanlorencista. Arrancamos sin un espacio físico, sólo juntando donaciones en el grupo de Whatsapp de la agrupación. Íbamos al oratorio San Antonio, a Don Bosco, a la 1 – 11 – 14.
Sin embargo, esta ayuda no les parecía suficiente y un recuerdo de Lorena fue lo que les dio el puntapié para empezar a diagramar la actual olla popular. Me acordé que en la Casa del Vitalicio hace muchos años la Subcomisión del Hincha realizavba un merendero para los chicos que estaban con apoyo escolar. Así con esa historia en su memoria, se pusieron en marcha para utilizar este espacio que es de San Lorenzo. Hablamos con Fede de la SCH, nos dijeron que sí, nos abrió el local, probamos el agua, el gas, la luz. Cristian (Evangelista) empezó a conseguir donaciones, empezamos a pedir y arrancamos.
Teniendo en cuenta la situación sanitaria actual, la agrupación debió reacomodar el cronograma para poder cumplir con los protocolos necesarios para llevar adelante la actividad. Los grupos de trabajo realizan los lunes y jueves tareas de limpieza, los martes y viernes se va a cortar la mercadería y preparar la comida. Vamos distribuyéndonos entre gente de la Subcomisión y la agrupación ‘Con el alma en Boedo’. Ahora se sumaron chicos de boxeo, se suma gente de juventud San Lorenzo, vecinos que vienen a ofrecerse. A muchos les decimos que no porque no puede haber 30 personas. Los días que se entrega la comida somos entre 15 y 18 personas, el resto tratamos de esta no más de 12 personas.
Una vez que las tareas estaban distribuidas, los integrantes de esta movida solidaria se pusieron manos a la obra, y ya han entregado miles de porciones de comida a quienes se han acercado a la Casa del Vitalicio. El primer día, hicimos 400 porciones de las cuales habrán sobrado unas 70 u 80 y las fuimos a repartir por el barrio. Al segundo día, hicimos 500 porciones y repartimos 500 porciones. Y a partir de la segunda semana empezamos a repartir 700 u 800 porciones. Uno de los chicos de la Subcomisión, Diego, se puso con la computadora en la puerta y ahí empezamos a sacar los cálculos bien de cuántas porciones estábamos dando. La última vez entregamos 1700 porciones.
Muchos de los que forman parte de la olla popular tenían la creencia que la comida iba a estar destinada a personas que se encuentran en barrios vulnerables aledaños al barrio, pero no fue así. Es la realidad social y el presente que estamos viviendo, cuando hicimos la primer entrega de comida hicimos un análisis de ver qué gente venía y esa noche creo que muchos de nosotros no dormimos porque nos dimos cuenta que todos eran vecinos del barrio: Mármol, Salcedo, Inclán, Muñiz, Las Casas, todo alrededor de nuestro barrio, todos vecinos nuestros, gente de clase media. Entonces eso fue lo que nos impulsó y nos dio más fuerza para agregar otro día para reforzar y para poder llenar mas panzas. Fuimos creciendo.
Esta acción social está demostrando a quienes no están a favor del estadio sobre Av. La Plata que los que se están movilizando para colaborar son los propios hinchas del club azulgrana, porque para muchos no todo e fútbol. Con la vuelta a Boedo no hay marcha atrás; vamos a volver con estadio, con todo como pedimos porque creo que por naturaleza y por justicia es lo que nos corresponde. Cuando arrancamos no pensamos en ningún momento en poner a los vecinos del lado nuestro, nosotros lo que pensamos era brindarle una mano al vecino, en que puedan tener un plato de comida porque hay mucha gente que la pasa mal.
Gracias a la gran cantidad de donaciones que reciben, no solo colaboran con el barrio de Boedo sino que ayudan a otras agrupaciones que también realizan ollas populares. Arrancamos con plata nuestra y a la semana siguiente ya empezó gente a traernos cosas. Arrancó una olla que le da de comer a 250 personas en la canchita que está en Cochabamba entre Castro Barros y Colombres, y nosotros lo que podíamos juntarles se lo mandábamos. Ahora capaz que nos donan cinco bolsas de papas, nosotros usamos dos y les mandamos una a ellos, le mandamos una al club Nueva Generación, al club Estrella. A los bomberos de La Boca también les mandamos. A Parque Chacabuco, a Soldati y ahora se suma otra de Floresta. Hoy le dimos a una del Bajo Flores. Estamos ayudando a muchas ollas porque como recibimos muchas donaciones, ayudamos a incentivar a que llenen más panzas.
La idea nacida en el barrio de Boedo, en el mismo donde nació San Lorenzo para sus vecinos y zonas limítrofes, podría multiplicarse. A veces viene gente porque tienen hambre y capaz que vienen con la remera de otro cuadro y lo cargamos, pegamos buena onda y la realidad es esa, darle una mano al otro es lo más importante. Le devolvimos al barrio la identidad para que los vecinos vean que no solamente queremos una cancha, que San Lorenzo siempre fue grande por sus valores fundacionales, de cultura, de solidaridad, de deporte, de educación y es lo que queremos volver a instalar en el poder recuperar en nuestro barrio.
Mas allá de que estamos volviendo al barrio que nos vio nacer, para poder concretar nuestro sueño es de suma importancia que se sancione la Ley de Rezonificación antes del 10 de diciembre que es cuando se cumple el plazo para su tratamiento. Sabemos que varios vecinos no están de acuerdo con la construcción de un estadio en donde hoy están los restos de lo que fue el hipermercado Carrefour, pero también estamos convencidos que esto producirá un renacer para el barrio. Todos los comercios de alrededor van a tener una actividad muchísimo más fuerte. No solo que lo pensamos, sabemos que va a suceder. Me parece que hay vecinos que están en contra porque no entienden de qué se trata, porque les hablan de futbol y de violencia. Por eso pedimos justicia por San Lorenzo.
Si ya llegaste hasta acá y te quedó la duda de cómo poder colaborar con la agrupación ‘Con el alma en Boedo’, te contamos que podes acercarte a la Casa del Vitalicio (Inclán y Muñiz), los días martes, miércoles y viernes a partir de las 12 del mediodía hasta las 20 Hs. y los días sábados de 8 a 15 Hs. También podes comunicarte a través de las redes sociales de ellos o de la Subcomisión del Hincha.
Porque no sólo vamos a volver todos sino que seguiremos demostrando lo importante del rol social que cumple San Lorenzo en el barrio de Boedo.