Con un texto de Julián Fernández (@Juli_Fernnandez en twitter), ElPlateista despide a un dirigente, periodista partidario y muy buena persona. Hasta siempre Oscar Sacco.
«Es muy difícil explicar la lealtad. Pero hay casos en los que no se puede describir con palabras y si con acciones, gestos de amor que son incondicionales y que para los ojos de otro significaría una locura o una estupidez. Pero más estúpido me parecería no querer reconocer lo que realmente representa para cada uno.
Y todas estas sensaciones me las genera mi querido San Lorenzo de Almagro, uno de los clubes más sufridos, pero mejor acompañados a lo largo de la historia, no solo de argentina, sino del mundo. Con una riquísima historia digna de admirar por parte de cualquier amante del fútbol.
Hay muchas hinchadas, pero La Gloriosa Butteler es única en su especie. Llena de originalidad y alegría. Siempre alentando, cantando y gritando sin parar en cada cancha, poniendo en evidencia que San Lorenzo siempre fue local en el Monumental, en La Bombonera y en todos los estadios del país, mostrando que el cuervo no es sólo un simple visitante del montón.
Esta familia siempre estuvo llena de alegrías, como el campeonato invicto del 68, el glorioso equipo de Pellegrini en 2001, las maravillas del 2007 con Ramón Díaz y la tan ansiada Libertadores que nos dio Bauza para volver a sentirnos plenos y pensar que lo imposible no existe.
Pero más allá de las alegrías que pudimos disfrutar, también hubo momentos duros que forman parte de la historia de esta hermosa familia.
Es fácil ver a un hincha de otro club decir «de qué barrio sos» o «tu cancha es un supermercado», más cuando no saben que su grandeza se dio a causa de nuestra desgracia, pero esa es otra historia. Nunca entenderían lo que significa que te despojen de tus cosas, de tus alegrías, de tu hogar. Y todo por el simple hecho de querer hacerle ver una realidad a un país que vivía tiempos oscuros, en donde San Lorenzo sacrificó toda su gloria y su grandeza por una causa noble. Fuimos callados, expropiados y casi extintos.
Pero todas esas injusticias nunca fueron excusas para que esta familia siga adelante. El deseo de recuperar nuestra casa siempre se mantuvo latente, vivió y vive en todos nosotros hasta el día de hoy. Todavía tenemos el sentido de pertenencia que nos dejaron aquellos cuervos que disfrutaban de ir al Viejo Gasómetro a ver a nuestro equipo. Que sufrieron por nosotros al ver como todo se iba desmoronando a pedazos y siguieron ahí a pesar de que las cosas se tornaron imposibles de un día para el otro. Se vivieron momentos muy duros, como cuando descendimos y desde lo futbolístico no había consuelo. Pero la hinchada se hizo presente rompiendo récords históricos de entradas en todas las canchas para ver al ciclón otra vez en primera. Por más de todos los disgustos, a este club lo único que no le pudieron sacar es a su gente, fiel y presente en cada momento de su bella historia.
Pero como toda familia hay integrantes que no pueden estar hoy con nosotros, que no pudieron compartir momentos hermosos al lado nuestro y que su único deseo siempre fue volver al lugar que nos pertenece para que volvamos a ser felices todos juntos.
Por cosas como estas, es que cada día estoy más orgulloso de pertenecer a esta familia, que sé que nunca me va a abandonar y va e estar en las buenas y en las malas, más que nunca.
Por eso mismo, nunca nos olvidemos de los que lucharon por la vuelta a casa y que lamentablemente ya no están con nosotros, que nos van a ver desde arriba y se van a sentir tranquilos porque ya pudimos recuperar el lugar donde alguna vez ellos fueron las personas más felices del mundo.
San Lorenzo es más que un club, es una familia y es la más leal de todas, es un gigante dormido que cada día está más cerca de despertar.
Volvamos a casa, no solo por nosotros, sino también por los que ya no están.»
Oscar Sacco fue recientemente reelecto como Asambleista de San Lorenzo. También es parte de la subcomisión de Fútbol Senior de la Institución, que preside Marcelo Moretti. Sus primeros pasos en el fútbol los realizó desde el campo de juego, siendo refereé y juez de línea de primera división. Su otra pasión fue el periodismo deportivo y partidario. Donde condujo por muchos años A Todo Ciclón. Desde su partida el 27-05-20, ya lo extrañamos.