Ante las múltiples versiones que se dispararon en las últimas horas, ElPlateista se contactó con varios dirigentes, allegados y futbolistas del Club para sacar en limpio lo sucedido.
En el fútbol argentino es frecuente que se paguen los sueldos de los planteles saliendo a buscar dinero fuera del club. Los clubes suelen financiarse recurriendo a préstamos, los cueles se cancelan ante la venta de jugadores durante los siguientes mercados de pases.
¿Por qué esto no pudo repetirse ahora?
COVID-19. La pandemia afectó la liquidez y la dinámica del dinero en todo el mundo. El mercado financiero empezó buscar inversiones más seguras, con mayor respaldo o simplemente prefirió el atesoramiento.
En un comienzo, a través de contactos en el fútbol suizo, se buscó realizar el descuento de documentos a favor de San Lorenzo. Algunas de las operaciones por las cuales al Club le debe ingresar dinero son las de: Senesi, Ávila, Blandi, Reniero y Pitón.
Cuando los diferentes torneos alrededor del mundo se dieron por finalizados, el banco con el que se estaba negociando empezó a dudar sobre la solvencia de los equipos ante un parate por tiempo indeterminado de la competencia.
En ese momento se enfrió la posibilidad de vender dicho pagaré.
La bala de plata
Para ese entonces, luego de casi un mes de negociaciones, se empezó a gestionar la posibilidad de un crédito. ¿Pero qué podría garantizar un préstamos en dólares por el valor de lo que serían un par de cuotas pagadas a INC S.A.?
La respuesta la tuvo el presidente de San Lorenzo, el cual debió garantizar el préstamo con sus cuentas personales. Brindó, lo que en la jerga se llama “garantías líquidas”.
¿Cuánto le costará a San Lorenzo ese dinero?
Según una de las fuentes consultadas por ElPlateista, el costo de dicho crédito se acerca al 8,4% anual. Cabe destacar que el crédito que logró San Lorenzo, se devolvería en un plazo menor a un año, lo que hace que el costo de la operación sea proporcional a dicho tiempo.
¿Qué se hizo con ese dinero? ¿A quién se le pagó?
Se le pagó la totalidad de las deudas mantenidas con el plantel previas al COVID-19. También debería alcanzar para generar un colchón pensando en el pago a los empleados en los próximos meses.
A los jugadores se les abonó una cifra que ronda los 160 millones de pesos. Priorizando algunos parámetros puntuales:
• Juveniles (que poseen contratos bajos para la media del fútbol) ya cobraron hasta el mes de abril;
• Plantel profesional Modelo Segundo Semestre 2020, luego de la depuración de aquellos jugadores que no van a continuar, están al día;
• Jugadores con poder de reventa (el Team, Uvita, Juan Edgardo, Luquitas, Torito, etc.) también se encuentran al día;
• Los que se piensa que no van a renovar: Bareiro (quien ya retornó a Paraguay), Poblete, G. Rodríguez, etc, en su mayoría cobraron hasta febrero. Se deberá analizar el desenlace se sus contratos;
• Los que están fuera del plantel: Cerutti y Navarro, deberán negociar su salida del Club.
Obviamente acá se nota el trabajo de Mariano Soso, quien se encuentra armando un plantel a las medidas del campeonato que toque jugar al reanudarse la competencia, pero sin olvidar la pata económica del Club.